miércoles, 26 de diciembre de 2012

Pizza Campanese, con grelos, panceta y Ricotta

Receta: Aldo Barreiro

La idea de cocinar algún tipo de masa acompañada de carne, pescado o vegetales sobre ella o en forma de relleno, es común a muchas culturas. En todo el mundo encontramos ejemplos de platos preparados de esta forma: pizzas, empanadas, burritos, galettes, dumplings, blinis... aunque son muy diferentes en el resultado, suelen ser platos populares y que gustan a casi todos. La pizza es original de la cocina napolitana y su popularidad ha hecho que se extienda por todo el mundo en una infinidad de variantes. Sin embargo, la pizza napolitana sigue siendo única, y por ello desde el año 2010, cuenta con la denominación europea de Especialidad Tradicional Garantizada.

En UTA os propondremos varias ideas para que preparéis deliciosas pizzas caseras, que aunque no sean comparables a la auténtica pizza napolitana de masa finísima y cocinada en horno de leña, seguro que triunfarán. La receta que os traemos hoy es de Aldo, y está inspirada en una pizza que él probó durante una estancia en Nápoles, la capital de la región de Campania, en el sur de Italia y siempre dice que es una de las más ricas que probó. Los cime di rapa son las hojas de los nabos en el momento en que van a florecer, lo que en Galicia conocemos como grelos. Los grelos se consumen en pocos lugares de Europa destacando Galicia, el norte de Portugal y el sur de Italia.

El sabor amargo característico de los grelos en contraste con la cremosidad del queso Ricotta resulta delicioso, ¡ya nos contaréis!.

Dificultad: baja

Tiempo de preparación: 1h 45min (incluyendo el tiempo de reposo de la masa)

Necesitáis:
Para la masa
350-400 g de harina de fuerza o mitad normal, mitad fuerza (harina tipo 55) o también podéis utilizar una harina especial para pizzas.
1/2 taza de leche desnatada.
1/2 taza de vino blanco.
Levadura de panadería. Sirve la deshidratada de panadero que se comercializa en sobres.
Una pizca de sal.

Para los ingredientes
Salsa de tomate (si la tenéis natural, mejor, sino una sin aditivos preferentemente).
150 g de queso mozzarella para pizza rallado.
Un manojo de grelos.
Un trocito de panceta curada o cocida o panceta en lonchas.
1 tarrina de 250 g de queso Ricotta

Cómo se hace:
1. Primero se prepara la masa para la pizza. Para ello, ponemos la harina en un bol mezclada ligeramente con la levadura, hacemos un hueco en el centro y vertemos el líquido, es decir, la leche y el vino. Añadimos la sal. Removemos con una cuchara de madera poco a poco para que la harina vaya absorbiendo el líquido y cuando veamos que se puede manipular con los dedos, la ponemos en una superficie para amasar espolvoreándola un poco de harina. La vamos amasando con las manos hasta que quede uniforme y manejable. La masa debe estar blanda sin quedarse pegada. La dejamos con forma de una bola, hacemos un corte en cruz con un cuchillo, la tapamos con un pañito holgado y la dejamos reposar 45 minutos a 1 hora para que suba.
2. Mientras la masa sube, lavamos los grelos, descartamos los tallos gordos y las hojas que puedan estar más estropeadas. Cocemos los grelos en agua hirviendo con un poco de sal. Para echarlos en la olla, se dobla el manojo por la mitad y se retuerce hasta que se rompa. Dejamos cocer durante 10 minutos, los sacamos y los dejamos escurrir un poco.
3. Ponemos el horno a precalentar a 220 grados. Preparamos la masa de la pizza extendiéndola con un rodillo de forma rectangular, procurando que quede lo más fina posible. Colocamos la masa delicadamente sobre la bandeja del horno previamente engrasada con aceite de oliva.
4. Preparamos la base de la pizza con salsa de tomate y queso mozarella. Añadimos los grelos y la panceta cortada en trocitos (poner una cantidad al gusto). Metemos la pizza en el horno y la dejamos cocer durante 10 a 15 minutos.
5. Pasado ese tiempo untamos la pizza con queso Ricotta, mezclándolo un poco con los grelos y la panceta, volvemos a meter en el horno aproximadamente 5 minutos hasta que la masa esté hecha. Los tiempos dependen del horno, pero no debemos dejar mucho tiempo el Ricotta en el horno, porque se seca y pierde la cremosidad.

¡A disfrutar!

No hay comentarios:

Publicar un comentario